Revista mensual de publicación en Internet
Número 38º - Marzo 2.003


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Sin aliento

Por Víctor Pliego de Andrés. Lee su curriculum. 

Fausto. Ópera en cinco actos. Música de Charles Gounod. Libreto de Jules Barbier y Michel Carré, basado en la obra homónima de Goethe. Aquiles Machado (Fausto); Robert Hale (Mefistófeles); Mariella Devia (Margarita); Lola Casariego (Siébel). Director de escena: Götz Friedrich. Director musical: Alain Guingal. Coro y Orquesta Titular del Teatro Real. Teatro Real de Madrid, 7 a 18 de febrero de 2003. Producción de la Opernhaus de Zürich (1997).

Fausto es un título legendario del repertorio operístico francés y su presentación en el nuevo Teatro Real era un acontecimiento que antes o después tenía que producirse. La producción ha contado con unas excelentes voces para los papeles principales, grandes, bellas, precisas y con fáciles agudos. Devia, Machado y Hale han podido lucirse plenamente con esta obra y han mostrado un altísimo nivel artístico. Aunque se volcaron en sus interpretaciones, los cantantes no consiguieron alentar una producción que en general ha sido anodina y carente de fuerza. Margarita aparece sin ningún encanto, lo cual debilita profundamente la supuesta historia de amor que conduce el argumenta. Los rasgos de humor, que hubieran sido redentores, tampoco causan el efecto deseado, tal vez porque la capacidad de sorpresa de público, que ya está curado de espanto, se ha reducido enormemente en los últimos tiempos. La escena final del aquelarre resultó ingenua. Pareció una celebración discotequera de algún grupo circense más que una siniestra congregación. El lirismo y la fantasía de la obra se vieron ensombrecidos por una propuesta arriesgada, intelectualmente coherente, pero ineficaz sobre el escenario. Abordar el asunto de Fausto desde una perspectiva expresionista es una ocurrencia prometedora y coherente con la tradición germánica, pero que no acaba cuajar, tal vez porque esta ópera tiene -obviamente- mucho más de francesa que de alemana. La escenografía austera, geométrica y dura tampoco hubiera quedado mal de haber contado con una iluminación un poco más acertada, más sutil y menos sicodélica. El Teatro Real ha querido homenajear con esta producción y con una exposición simultánea al maestro alemán de la escena Götz Friedrich (1930-2000) que desarrolló la mayor parte de su intensa carrera profesional en Berlín. Por tratarse de una reposición (la producción es de 1997), tal vez el montaje se haya abordado con menos entusiasmo que de haber sido nuevo. Lo cierto es que la función no creó el hechizo que Fausto requiere. El director y la orquesta tampoco estuvieron muy acertados, pero a pesar de todo ello las bellas melodías de Gounod pudieron resplandecer servidas por el excelente elenco vocal.

(Fotografía de Javier del Real)

Próximos espectáculos del Teatro Real

 

5 a 23 de marzo. Die Walküre de Wagner

          Nueva coproducción con la Sächische Staatsoper Dresden Semperoper.

 

13 de abril a 9 de mayo. La Favorita de Donizetti

          Nueva coproducción con el Gran Teatro del Liceo de Barcelona.

www.teatro-real.com