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Número 25º - Febrero 2.002


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BARBARA FRITTOLI CANTA VERDI 

Por Ignacio Deleyto Alcalá. Lee su Curriculum.

 


     Segundo recital de la italiana Barbara Frittoli para ERATO (8573-85823-2). Si el primero (Filomusica, Junio 2001) estaba dedicado enteramente a Mozart, este es un monográfico Verdi con páginas de Traviata, Don Carlo y Trovatore y otras algo menos conocidas de Il Corsaro, Luisa Miller y Simon Boccanegra dirigidas todas por Colin Davis (ver programa completo abajo). 

Barbara Frittoli, nacida en Milán, es una soprano de relieve como lo demuestran sus frecuentes apariciones en los grandes escenarios líricos del mundo y varias grabaciones ya a sus espaldas. Desgraciadamente en el disco no hay representación de sus Desdemona y Alice, papeles que ha subido a escena recientemente en varios teatros.

En este recital verdiano nos encontramos con papeles que piden por lo general una  lírica aunque la Luisa Miller sea para soprano lírico-spinto e Il Trovatore para dramática coloratura. Como ya comentábamos con ocasión de su disco Mozart, la soprano es de voz potente, con cuerpo y rica en matices. Muestra facilidad tanto en los agudos como en la zona grave. Además, su dicción es ejemplar, supera las agilidades con facilidad, posee amplio fiato y muestra resolución y valentía en la coloratura. A veces revela un vibrato poco disciplinado que no empaña su magnífica interpretación en la mayoría de las arias. 

El disco se abre y se cierra con dos famosas escenas de Traviata en las que la soprano italiana muestra penetración psicológica en el complejo papel de Violetta. En su primera intervención y gracias al lentísimo tempo marcado por el director, Frittoli construye una escena muy reflexiva, recordando el pasado, regulando intensidades con agudos en piano bien realizados y de gran expresividad. Debemos mencionar el interesante cambio de tempo marcado por el director en el final de "Sempre libera", acelerando la orquesta, con lo que se gana en tensión y brillantez. La soprano, con el acompañamiento de cellos en vez de tenor, no hace el sobreagudo final no escrito por Verdi. En "Addio del passato" con un tempo moroso que ayuda a explicar la fragilidad y desvalimiento de la protagonista nos encontramos con una voz cristalina de tímbrica refinada, suave y acariciante, que presagia su inevitable fin.

El aria “Come in quest’ora bruna” de Amelia del Simon Boccanegra es seguramente la más famosa de toda la ópera. El intenso preludio de escritura transparente que precede a la intervención de la soprano representa la descripción de un jardín en ese momento mágico cuando la noche va dejando paso al amanecer con las figuraciones de los violines, la ligereza de las maderas y un bello acompañamiento repetitivo aunque un punto obsesivo. Frittoli resuelve el aria con una voz leve y fresca, alcanza el Si bemol agudo final con resolución para preparar un cierre de aria muy poético, recogiendo y plegando la voz dulcemente (dolcissimo prescribe Verdi). Sin llegar a la belleza tímbrica de Mirella Freni, Frittoli hace una interpretación de gran nivel.

Aún mejor está en el aria y posterior escena de Luisa Miller, uno de los puntos culminantes de toda la partitura. Es un aria de bravura donde la soprano demuestra sus dotes para los papeles de mayor peso dramático. A destacar el ascenso al Si natural agudo para luego descender con una bella escala cromática. Le sigue el dramático dúo con Wurm (aquí el bajo Ildar Abdrazakov), el malvado que chantajea vilmente a la protagonista. Frittoli muy temperamental, muestra sus dotes expresivas y en las frases finales hace uso de un legato perfecto, a media voz, con excelente manejo de las intensidades y amplio fiato. Además sin el truco de cortar las palabras "mi chiuda" como hace Caballé en su grabación oficial para poder ligar "omai" con "almeno" que resulta más fácil. 

Otro de los momentos más conseguidos es la cabaletta “Di tale amore” de Il Trovatore con las notas staccato perfectamente realizadas, limpias y una dicción ejemplar así como la famosa “D’amor sull’ ali rosee” a un tempo lento con el que no se pierde detalle de la partitura y una voz pastosa, trémolos de libro y graves bien colocados y resonantes. Qué maravilla la frase final "le pene del mio cor!" subiendo al agudo con delicadeza en una lectura expresiva en perfecta consonancia con el texto. 

Colin Davis al que normalmente no se asocia con Verdi hace lecturas poco idiomáticas pero se pliega perfectamente a los recursos interpretativos de la soprano y desmenuza las partituras sin descuidar ni un solo detalle además de lucirse en los dos extractos orquestales incluidos. La London Symphony Orchestra, versátil como pocas, demuestra una adecuación extraordinaria por el repertorio verdiano. 

En definitiva, un monográfico Verdi que no aburre ni un solo instante en la voz de una soprano que a pesar de su juventud pasa ya por una evidente madurez.

Programa:

1. La Traviata, E Strano, è strano...Sempre libera 2. Il Corsaro, Egli non riede ancora...Non so le tetre immagini 3. Don Carlo, Tu che le vanità 4. Il Trovatore, Ne' tornei...Tacea la notte placida...Di tale amore 5. Luisa Miller, Sinfonia 6. Luisa Miller, Tu puniscimi, o Signore...A brani, a brani, o perfido 7. Simon Boccanegra, Come in quest'ora bruna 8. Il Trovatore, Timor di me?...D'amor sull'ali rosee...Tu vedrai che amore 9. La Traviata, Preludio Acto III 10. La Traviata, Teneste la promessa...Addio del passato