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LA DIVA REBELDE
Por Pedro
Coco
La soprano
neozelandesa Kiri Te Kanawa ha desarrollado una de las carreras más
elegantes del panorama operístico internacional, y su inminente ocaso
se está llevando a cabo del mismo modo. En estos momentos sólo
ofrece una escasa decena de conciertos al año y ocasionalmente la
representación de alguna ópera: la última, Vanessa de
Samuel Barber, con un gran éxito en Montecarlo. Este recopilatorio
que ofrece EMI nos muestra la versatilidad de la soprano, que siempre
ha sentido cierta "claustrofobia" a dedicarse por entero a
la ópera y cuyo amplio repertorio abarca desde el barroco al oratorio
contemporáneo, pasando por unas personalísimas canciones de
Broadway.
Sin embargo, a primera vista se detectan dos imperdonables ausencias.
La primera, más leve, un caballo de batalla en sus recitales: Po
Karekare ana, una deliciosa canción maorí 'a solo'. La segunda
ausencia es imperdonable: Strauss. Kiri Te Kanawa es una de las
mejores straussianas de los últimos años, y se echa de menos aquí
algún ejemplo de su arte en este campo. Quizás por razones de
espacio haya sido imposible recoger la escena final de Arabella
o Capriccio, o la impagable del espejo en Der
Rosenkavalier.
A pesar de estas ausencias, podemos disfrutar con el disco de
principio a fin, ya que se han sabido elegir algunas páginas que Te
Kanawa ha mimado en numerosas ocasiones y otras sobre las que sólo ha
pasado de puntillas pero siempre dejando su personal sello.
En el repertorio del XVIII su voz encuentra el vehículo perfecto para
mostrar el timbre luminoso y esa cremosidad tan peculiar. No podían
faltar "Let the bright Seraphim" de Handel, pieza que cantó
en la más famosa de las bodas reales, o "Dove sono", de Le
Nozze di Figaro de Mozart, ópera que la lanzó al estrellato
operístico desde el Covent Garden.
Ha frecuentado en menores ocasiones el terreno de la ópera italiana,
aunque ha hecho suyos algunos papeles verdianos como Desdemona o
Amelia Boccanegra. Sin embargo, aquí se opta por un "Addio del
passato" que aunque delicado, no es su mejor Verdi. En el verismo
hay de todo, y aquí se han sabido seleccionar las mejores páginas de
la neozelandesa. Sin duda, a la cabeza de todas se encuentra el famoso
'Sogno di Doreta', que grabó pletórica de medios en 1982 y que
ninguna soprano desde entonces ha sabido expresar de modo más melancólico.
Muy acertadamente se incluye uno de los más famosos Cantos de
Auvernia, "Baïlèro". Esta colección llegó a
aparecer por mucho tiempo en la lista inglesa de más vendidos.
En el terreno del musical y la canción ligera, podemos disfrutar de
la cálida de voz de Kiri Te Kanawa, que resulta igual de seductora
sin impostar. El disco de jazz que grabó con Previn nos muestra su
entusiasmo y afinidad con un género del que se muestra entusiasta
absoluta.
Los admiradores de la soprano encontrarán en este disco la mejor
manera de refrescar su memoria musical durante más de una hora, y los
que quieran acercarse por primera vez al arte de Kiri descubrirán la
razón por la que se ha distinguido durante más de treinta años la
carrera de esta soprano.
REFERENCIAS:
KIRI TE KANAWA. Arias y canciones de Handel, Mozart, Bach-Gounod,
Verdi, Puccini, Cilea, Charpentier, Fauré, Canteloube, Holst,
Bernstein, Gershwin, Kern, Berlin, Porter y McCartney. Varias
Orquestas y directores.
EMI-7423 5 57231 2 3.
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