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Número 3º - Abril 2000


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...Y GÜNTER WAND LLEGÓ A BERLÍN

Por Angel Riego Cue

Hay ocasiones en que los elogios o los premios de la crítica han de leerse "entre líneas" o interpretarse, por así decirlo, "en su contexto". Un ejemplo lo tenemos en el caso del venerable director alemán Günter Wand (nacido en 1912 y, según parece, aún en activo). Aunque con alguna antigua grabación con la Filarmónica de Viena, de su labor discográfica se recuerdan únicamente sus trabajos con orquestas alemanas de segunda fila (las de la Radio de Colonia, Hamburgo, etc.). No conocíamos ningún registro suyo con la Filarmónica de Berlín, a pesar de venir dirigiéndola desde 1949. Por ello, cuando a principios de 1996 apareció en el mercado un doble CD (RCA 09026 68314 2) grabado con dicha orquesta en marzo del año anterior, la crítica, en general, lo interpretó como el "reconocimiento a la labor de toda una vida". El maestro, al fin, veía reconocido su trabajo al permitírsele grabar con la primerísima orquesta alemana.

El programa consistía en las dos últimas sinfonías de Schubert, 8º "Incompleta" y 9º "La Grande", que ahora se numeran 7ª y 8ª. Inmediatamente, la mayoría de la crítica comenzó a elogiar este registro: podemos citar un Premio del Disco de Cannes (en el supuesto que estos premios importen algo), o el hecho de que la revista "Gramophone", en una tabla que publicaba con las versiones más recomendables de obras del repertorio (al menos, de grabación moderna) elegía, para estas dos sinfonías de Schubert, la presente de Wand.

La valía real de los discos era lo de menos: escuchados sin prejuicios, lo que nos encontramos es una versión simplemente artesanal, en la gran tradición, eso sí, de la dirección de orquesta alemana, y hecha con buen oficio, pero con escasa imaginación, sin tampoco pretender ninguna originalidad. No faltan las brusquedades deliberadas típicas del estilo "kapellmeister" en los momentos fuertes, que parecen dirigidos a "brochazos".


Después de este debut berlinés, Wand ha seguido grabando con esta orquesta, y ha comenzado el que parece que será, si lo llega a terminar, su último ciclo de sinfonías de Bruckner, las cuales ha llevado al disco una y otra vez con diferentes orquestas de radio, y se consideran su máxima especialidad. Han aparecido ya tres sinfonías: Quinta (RCA 09026 68503 2, grabación de enero de 1996), Cuarta (RCA 09026 68839 2, febrero de 1998) y Novena (RCA 74321 63244 2, septiembre de 1998).

La "Quinta" aún podría recomendarse debido a que no hay muchas versiones sueltas de esta obra, aparte de las pertenecientes a ciclos completos. Es una versión correcta, sí, y hecha con los modos de la gran tradición de directores alemanes, pero termina por hacerse anodina. La Filarmónica de Berlín, como ocurre en general con estos discos, tampoco está aprovechada al máximo, y la dirección peca de "poca chispa", y por contra, de exceso de rudeza en ciertos momentos.

La "Cuarta" nos parece el mayor logro de Wand en todos estos discos, aunque en una sinfonía tan grabada, la competencia con versiones de referencia como Böhm o Karajan (la de EMI) es difícil. En todo caso, Wand podría aspirar a competir entre las mejores grabadas en DDD de los últimos años. La versión empieza bien, y luego va a menos, lo menos bueno (por más anodino) es el último movimiento.

La "Novena" conoce una interpretación enormemente tranquila, relajada, como si Wand estuviera "de vuelta" de muchas cosas. La crítica le ha repartido elogios como "profunda" o "interiorizada", aunque más bien nos parece la más anodina de todas: desde luego, teniendo la competencia que tiene, sólo entre las DDD (recordemos a Giulini con la Filarmónica de Viena), se hace difícil recomendar esta versión de Wand.

En suma, así avanza este ciclo Bruckner, que por supuesto deseamos al maestro que pueda terminar, ya que parece la culminación de toda su carrera: con todo, no dejamos de preferir al Wand anterior, el que trabajaba con orquestas más discretas, de emisoras de radio, pero con las que también hacía versiones mucho más llevaderas, como aquella "Séptima" de 1980 con la Radio de Colonia.