Revista mensual de publicación en Internet
Número 31º - Agosto de 2.002


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Capella Mallorquina, la pureza del canto polifónico

 

  

 

La agrupación coral que hoy les presento, tiene el privilegio de haber sido la máxima promotora del movimiento coral en las Islas Baleares, mostrando a todos sus habitantes, pero no sólo a ellos, la beldad del canto polifónico; motivo por el que ha recibido numerosas distinciones, entre las que destaca la Medalla de Honor del Círculo de Bellas Artes, que le fue concedido en 1988.

 Capella Mallorquina comenzó su andadura musical un 8 de junio de 1966 con un concierto que tuvo lugar en la capilla de Santa Ana del Palacio de la Almudaina. Desde entonces ha aumentado su repertorio superando las 600 obras y protagonizando más de 1000 conciertos con actuaciones en la práctica totalidad de las ciudades españolas y en países europeos, americanos, africanos y asiáticos; mostrando preferencia por el canto a capella, pero dejándose acompañar también por órganos, pianos, formaciones de cámara y orquestas.

Esta coral supone el relevo del conjunto polifónico creado por Juan María Thomas Sabater, Capella Clàssica (les remito al artículo del pasado mes de marzo), que ya entonces recibía los mayores elogios de reconocidas figuras como Joaquín Rodrigo o Xavier Montsalvatge.

La nueva agrupación, que cuenta con la Iglesia de San Nicolau de Palma como sede oficial, sigue recibiendo aplausos bajo la batuta del joven director José Mª Moreno, que sucedió en 1999 al fundador y director de la misma Bernat Juliá, un formado sacerdote, nacido en 1922, que realizó estudios musicales en Londres, Roma Solesmes (Francia) y Colonia (Alemania). Su amplísimo currículum se extiende, habiendo sido presidente de la Comisión Diocesana de Música durante 22 años así como instaurador de las Semanas Internacionales de Órgano en Mallorca (que continúan en la actualidad desde hace más de 30 años) y del Concurso Andrés Segovia o el Internacional Fryderyk Chopin.

 Pero si en algún evento se ha hecho imprescindible Capella Mallorquina es en los conciertos que cada año, en la época estival, tienen lugar en el Torrent de Pareïs.  

Estas audiciones comenzaron en 1964 gracias a la promoción del pintor catalán Josep Coll Bardolet, pero no fue hasta su quinto aniversario cuando Capella Mallorquina se incorporó a las mismas realzando, si cabe aún más, la magnificencia de tal paraje.

Hace unos años tuve la oportunidad de asistir, confieso que por sorpresa, a uno de estos conciertos; y puedo asegurar que dejarse deleitar por las acompasadas voces de esta coral es la mejor manera de terminar un agradable día veraniego, más aún si esos cantos son escoltados por la Camareta Sa Nostra en la interpretación de piezas de compositores como E. Toldrà, P.I. Tchaikovsky, F.J. Haydn o E. Grieg entre otros.

 El silencio inundó el Torrent y en un momento todo quedó impregnado por los movimientos de batuta del director. La platea, situada sobre los cantos rodados de esta soñada playa, aguardaba emocionada la interpretación de las sucesivas obras que componían el amplio programa y a su finalización se lamentaba (al menos yo) de la condición humana, al no poder retener por siempre en nuestros sentidos, la belleza, en mayúsculas, de tal momento.

Si tienen la oportunidad de asistir este año, no lo duden, les aseguro que no se lamentarán.

Dado que en estos momentos Mallorca está repleta de citas musicales, he escogido la XLI Edición del Festival de Pollença para visitarla en el próximo artículo. Hasta entonces.