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MÚSICA EN EL AUTO SACRAMENTAL BARROCO DE TIRSO DE MOLINA Por José Enrique Peláez Malagón. Doctor en Historia del Arte (Universidad de Valencia).
Introducción: El Auto sacramental:
Si bien existen algunas pequeñas diferencias metodológicas a la
hora de definir el auto sacramental, diferencias que hacen que unas obras
se puedan considerar autos unas veces y otras no. Lo cierto es que comúnmente
se acepta que auto sacramental es aquella pieza teatral, la mayoría de
las veces musicada o con canciones, de un único acto, con carácter alegórico
y religioso, que gira fundamentalmente al rededor de la Eucaristía y que
se representaba generalmente en la festividad del Corpus Christi. De hecho
Lope de Vega Lope en una Loa entre un villano y un
labrador, introductora del auto El dulce nombre de Jesús, da
una definición del género: «-¿Y qué son autos? - Comedias a honor y gloria del Pan que tan devota celebra esta coronada villa, porque su alabanza sea confusión de la herejía y gloria de la fe nuestra, todas de historias divinas».
El origen de los autos es incierto, fundamentalmente debido a que
desde el siglo XIII se han venido representando Los Misterios en la
festividad del Corpus, obras que pese a tener parecidas características
no son consideradas como autos. Por este motivo muchas veces se parte de
una definición cronológica, de tal manera que auto sería aquella pieza
con las características anteriormente señaladas, pero que es
representada en el Barroco. De hecho se toma la obra de Calderón de la
Barca como el punto álgido de los autos sacramentales. El propio Calderón
en la Loa de la Segunda esposa definía el auto por medio de la
labradora como: «Sermones puestos
en verso, en idea representable,
cuestiones de
la Sacra Teología, que
no alcanzan mis razones a
explicar ni comprender, y
al regocijo dispone con aplauso de este día».
En
definitiva podemos concluir y definir el auto sacramental como la pieza
teatral con música que usa de la alegoría como forma de aludir a la
Eucaristía, defendiendo los dogmas católicos por los que se considera al
pan y al vino de la misa como verdadera Sangre y Cuerpo de Cristo tal y
como en los Evangelios sinópticos se nos atestigua.
Fray Gabriel Téllez, verdadero nombre de Tirso de Molina
(1580?-1648) ha pasado a la historia de la literatura española por sus
obras dramáticas, conocidas son El burlador de Sevilla, La
venganza de Tamar o El condenado por desconfiado
, trabajos publicados a partir de 1605. Desde esa misma fecha,
comienzo de su producción, Fray Gabriel empieza a tener problemas con
otros clérigos que comienzan a calificar su obra de inmoral. Tanto es así
que terminará sin poder publicar nada, si bien se supone que existe un
importante número de piezas compuestas posteriormente paro que nunca han
salido a la luz. Por
lo que respecta a sus Autos Sacramentales, dado el carácter teológico de
los mismos, tuvo más suerte y pudo seguir editando obras. Éstas se
pueden, en líneas generales, englobar en tres periodos: Primer
periodo:
Corresponde a sus años en Salamanca estudiando Teología (1607-1616),
durante estos años escribirá cuatro Autos: A) El colmenero divino:
Obra de 1607 con modificaciones en 1609 y 1613. Aprovecha un
argumento de Lope de Vega en El pastor lobo, y una canción ya
tradicional: Pastorcillo nuevo. En la composición se introducen
hasta diez intervenciones musicales de tipo folklórico, destinadas más a
un tipo de publico rural que urbano.
En líneas generales toda la obra es una alegoría del Buen Pastor,
tal y como aparece en los evangelios: El Buen Pastor (Jesucristo) que
apacienta el rebaño (Pueblo de Dios) y que busca a la oveja descarriada
(pecador), celebrando y alegrándose por su vuelta al redil (Celebración
de la Eucaristía). En este caso la figura del Buen Pastor ha sido
cambiada por la del Buen Colmenero, la oveja por la abeja y el lobo, esto
es la tentación del mundo, por el Oso. En este contexto, la abeja se
dejará tentar por el mal colmenero y por el oso, pero al final logrará
superar estas dificultades y volver a la colmena, obteniendo el perdón.
Todo este argumento viene desarrollado por una serie de escenas en
donde se intercalan diez intervenciones musicales que profundizan en las
ideas más importantes del texto.
Estas intervenciones musicales serán: ·
Canto
de bienvenida: “Norabuena venga...” con alternancia de solista y coro ·
Canto
de la amada al Colmenero-Buen Pastor: “Pastorcito nuevo de color de
azoe...” ·
Canto
de pregón: “A la miel de los deleites...” para el cuadro de la
tentación (el mal colmenero) ·
Canto:
“Cuatro...” atraer el alma abeja a los deleites de la carne ·
Canto:
“Que besome en el colmenaruelo...” la abeja invoca el socorro del
Colmenero, cuyo beso que es la alegoría de la Encarnación la salva del
pecado ·
Canto:
“Cantad deleites profanos...” como moraleja cierto desprecio del mundo
cortesano y alabanza de la aldea ·
Canto:
“Esta si que es...” En donde los coros del Bien y del Mal luchan por
el alma (por la abeja) ·
Canto:
“Noche...” En él la abeja se deja convencer por segunda vez hasta que
al final todo termina cuando el Oso, el Mundo y el Mal se hunden
definitivamente. ·
Canto
del convite del Sacramento: Se hace por medio de una seguidilla sencilla
en donde el Cuerpo se duerme para la contemplación mística y la abeja
deja el vestido de luto por las bodas. ·
Final
instrumental como apoteosis de la Eucaristía. B) Nuestra Señora del Rosario o La Madrina del
Cielo:
El argumento de esta pieza gira en torno a un milagro ocurrido a un
ladrón de un rosario, propiedad de santo Domingo de Guzmán. Las
intervenciones musicales que aparecen reforzarán esta idea y harán
hincapié en las partes más importantes: ·
Primer
canto: Es un canto de vela que alude a la parábola de las vírgenes locas
y prudentes. ·
Segundo
canto: Por medio de un romance, se induce al lego novicio que ha robado a
volver al monasterio. ·
Tercer
canto: Representa la lucha entre las virtudes y los vicios por medio de
dos coros introducidos por solistas. Es el acto central y se constituye
como un gran entremés, a la manera que el autor ya los ha construido en
sus obras profanas. ·
Cuarto
canto: y último: La Virgen desciende acompañada de un bailarín y músicos
que cantan en tono de seguidilla. C) No le arriendo la ganancia:
Por medio de alegorías, Tirso vuelve a representar la lucha entre
el Bien y el Mal: Honor es vencido por Poder hasta que arrepentido vuelve
con la ayuda de Sabiduría, como el Hijo Pródigo, a la casa del
Entendimiento del Acuerdo y de la Quietud.
La música viene a profundizar en algunos actos y acciones de toda
la trama por medio de una serie de cantos en algunos momentos específicos
del desarrollo del argumento: ·
Primer
canto: “Quien bien tiene y mal escoge...” en donde se previene a Honor
de sus decisiones y en donde se muestra la vanidad de Honor cuando éste
elige a una segunda esposa: Mudanza ·
Segundo
canto: “Así cantaba un pastor...” De estilo cortesano y tema
pastoril. En ella se rechaza a Honor porque le recuerda tiempos
pasados más humildes ·
Tercer
canto: “Cantar mis penas quiero...” También de estilo cortesano, esta
vez dentro del tema “penas de amor”. ·
Cuarto
canto: “Si el honor por la mudanza medra...” De estilo cortesano en
donde en un tono de infortunio se canta como el Honor debe su puesto a su
mujer, Mudanza y al Poder. ·
Quinto
canto: “Ay, que el novio y la novia es bella...” Como contrapunto de
las músicas cortesanas anteriores, se introduce un cantar de bodas rústicas
entre Acuerdo y Quietud. ·
Canto
final: “ No le arriendo la ganancia...” Los músicos terminan el Auto alternando una forma solista en las coplas y un estribillo en
el coro, estando la última copla y estribillo en boca de un Honor ya
restaurado. D) Los hermanos parecidos:
Tirso de Molina, en este Auto, vuelve a recurrir a los personajes
alegóricos como el Atrevimiento, la Admiración, o el Engaño a los une
diversas figuras del Evangelio como Jesús, María Magdalena o el Buen
ladrón. Es una Historia general del Hombre y de su Creación, a la luz de
la Redención por medio del sacramento de la Eucaristía.
La parte musical es escasa, distinguiéndose tres grandes momentos
en la representación: ·
Primer
momento musical: “La fruta...” es una fanafarria que aparece a la hora
de introducir a la Vanidad en la escena, ésta, esposa del Hombre va
acompañada del Engaño y del Deseo. ·
Segundo
momento musical: Parte instrumental en el momento de la Crucifixión de
Cristo, que representa el momento culminante del Auto. Se hace hincapié
en la Sangre que es recogida en un cáliz con el que se celebra el
misterio eucarístico. ·
Tercer
momento musical: Es una seguidilla de “Acción de gracias” en donde se
cantan una serie de coplas en hexasílabos precedidas y antecedidas por un
mismo estribillo. Esta circunstancia introduce un nuevo elemento en la
seguidilla ya que hasta entonces la forma más común era la de una
letrilla. Segundo
periodo:
Gira en torno a 1619, tras su regreso de las Indias, componiendo un
célebre Auto. A) La ninfa del cielo:
Obra de 1619 cuyo precedente lo encontramos en la comedia de 1612 La
condesa bandolera o la ninfa del cielo. Siendo por tanto el Auto una
adaptación de la comedia con fines de representación durante la fiesta
del Corpus. Tercer
periodo:
Viene dado por su único auto compuesto en 1638. A) El Laberinto de Creta:
Obra de 1638. Es una comedia mitológica en la que Teseo viene a
liberar del orden antiguo al reino de Creta, matando al Minotauro y
restaurando a su fuerza primitiva la voluntad de Ariadna.
La música se constituye únicamente como elemento decorativo que
aparece en algunas partes. Bibliografía: ·
M.
AICARDO; “Autos sacra mentales de Lope de Vega”, en Razón y
Fe, XIX-XXIII, 1907-08. ·
I.
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E.
GONZÁLEZ PEDROSO; Autos sacramentales desde su origen hasta fines del
s. XVII, Madrid 1865 ·
N.
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del teatro teológico español, Madrid 1946 ·
I.
MARISCAL DE GANTE; Los autos sacramentales, Madrid 1911 ·
L.
ROUANET; Colección de autos, farsas y coloquios del siglo XVI, Barcelona
1901 ·
E.
SCHMIDT; El auto sacramental y su importancia en el arte escénico de
la época, Madrid 1930 ·
B.
W. WARDROPPER; lntroducción al teatro religioso del Siglo de Oro (
Evolución del auto sacramental), Madrid 1953 ·
E.
R. CURTIUS; Ensayos críticos acerca de literatura europea,
Barcelona 1959. Índice de Ilustraciones: 1)
Tirso
de Molina
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