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VIVALDI OPERASPor Fernando López Vargas-Machuca
Hay por ahí quienes andan poniendo en duda la valía de Antonio Vivaldi como compositor de óperas, faceta que en los últimos años viene experimentando un lento pero imparable proceso de redescubrimiento que aún ha de depararnos numerosas sorpresas, dado lo extenso del catálogo lírico -trátese de composiciones enteramente originales o de pastiches más o menos apañados- del "Petre Rosso". No vamos aquí a entrar en tan espinosa cuestión, pero sí a recomendar al lector que se haga con este sampler que le dará una buena idea de los asombrosos logros, y también de las evidentes limitaciones, que podemos encontrar en los cuatro títulos escénicos que hasta ahora han aparecido en la monumental Edición Vivaldi que edita un sello tan emblemático como Opus 111: Judita Triumphans, L'Olimpiade, Orlando finto pazzo y La verità in cimento. La interpretación corre a cargo de tres grupos señeros del panorama vivaldiano actual: la Academia Montis Regalis bajo la dirección de Alessandro De Marchi (protegido de Barenboim en la Staatoper berlinesa), el Ensemble Matheus liderado por el violinista fundador del cuarteto del mismo nombre, Jean-Christophe Spinosi, y finalmente el afamado Concerto Italiano dirigido por el ya muy curtido y prestigiosísimo Rinaldo Alessandrini. En todos los casos las lecturas son representativas de cómo se ve a Vivaldi en la actualidad: contrastado, incisivo, teatral y fantasioso, de una brillantez arrebatadora que, para algunas sensibilidades, puede resultar un tanto superficial. En todo caso, no hay nada aquí parecido a las excentricidades de Il giardino armonico ni, menos aún, a los amaneramientos insufribles de la muy sobrevalorada Accademia Bizantina. Las voces están francamente bien. Sobresalen dos nombres de lujo: la estupenda mezzo (soprano según algunos) Magdalena Kozena y la fabulosa contralto Nathalie Stutzmann. Junto a ellas encontramos algunas figuras señeras de la ópera barroca, como pueden ser Guillemette Laurens o Sara Mingardo, más el ya veteranísimo tenor Anthony Rolfe Johnson, cuya intervención en este disco es más bien episódica. En todo caso, interpretaciones de altura para descubrir un puñado de bellas melodías, algunos asombrosos hallazgos -sobre todo en el plano instrumental- y alguna que otra caída en la servidumbre y el convencionalismo. Lo dicho: si no le apetece comprarse las óperas completas, este sampler resulta de lo más recomendable.
REFERENCIAS VIVALDI: selecciones de
Judita Triumphans, L'Olimpiade, Orlando finto
pazzo y La verità in cimento.
Página web: www.naiveclassique.com Distribuidor en
España: DIVERDI
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