MÚSICA EN EL PAÍS DE LAS MARAVILLAS

Por Cristina Isabel Gallego García. Lee su curriculum. 

Alicia está sentada en un banco al aire libre, cuando repentinamente aparece un conejo blanco, vestido de chaqueta, que corre murmurando que llega tarde, mientras mira su reloj de bolsillo... No hace falta que continúe la historia para saber que me estoy refiriendo a una famosa obra de Charles Lutwidge Dodgson, conocido por el seudónimo de Lewis Carroll, profesor en la Universidad de Oxford, escritor, matemático, dibujante, fotógrafo, poeta... La obra “Alicia en el País de las Maravillas” es un libro clave de la literatura, no sólo infantil sino también para mayores, pues dice Carroll que para entrar en el terreno de la fantasía y el ingenio, no existe distinción de edades. 

Y en ese “País de las Maravillas” donde convivimos docentes y discentes a lo largo de la jornada escolar y también fuera de ella, nos adentramos el pasado mes de marzo, más de 200 alumno/as de infantil del centro y las maestras, gracias a una adaptación musical que preparó Acuario Teatro para los colegios de infantil y primaria.  

Esta compañía nace en Málaga a mediados de 1978 con la intención de acercar el teatro a los más pequeños, pero es a partir de 1982 cuando se renueva y da entrada a un grupo de artistas que serán en el futuro la base de todas sus creaciones, con la música, la estética y la sorpresa teatral como señas de identidad. En la actualidad, tras todos estos años de trayectoria ininterrumpida participando en festivales internacionales, programas de televisión, campañas escolares, ferias, cabalgatas... cuentan con un enorme reconocimiento popular, y sus trabajos son aplaudidos en colegios, teatros, ferias, calles y plazas de Andalucía.

Mi tutoría de infantil 3 años disfruta mucho con el cuento de Alicia. En clase  tenemos: libros adaptados, dibujos, juegos, la película de Disney... En algún momento de la semana siempre llega el “conejo blanco” cantando: “Me voy, me voy, que llego tarde hoy”,  los niños y niñas se convierten en gigantes al beberse la “botella mágica” (el zumo o batido que traen de casa) y subirse en los zancos, pero también en enanitos cuando no quieren  desayunar, recreamos con muchas canciones y dramatizaciones (originales o adaptadas) lo que cada personaje del cuento nos aporta... 

Y esta creatividad que siempre inunda las aulas de infantil, llenando corazones y cabezas, también se vio favorecida en el espectáculo musical al que asistimos, donde la protagonista nos invitaba a conocer su mundo a través de juegos, canciones... de las que nosotros ya formábamos parte desde el colegio:

-                Alicia recibió regalos (llave, libro, pelota...) como los que tenemos en clase al “pasar de una tarta a otra” (me refiero a las tartas de cumpleaños del corcho; algunos empezaron el curso con 2 años y otros ya están ahora en la tarta de los 4). Les encanta cantar “Regala lo que quieras”, siempre es buen momento para regalar nuestro cariño a las personas que nos rodean, con canciones, besos, abrazos, palabras bonitas...

-                buscan al “conejo” cuando no encuentran algún objeto o juegan al escondite.

-                si no desayunan se hacen pequeños, como las marionetas de clase,  pero al beber sus “botellas mágicas” crecen (disfrutan midiéndose para ver lo que han crecido desde que empezó el curso hasta ahora).

-                tenemos pañuelos como la protagonista, para que desaparezcan las lágrimas que a veces brotan de los ojos.

-                el hombre seta da consejos cantando, pero también sabemos que las setas nos alimentan y están muy buenas.

-                en el cuento, el gato hablaba; y en clase también hablan y cantan: el elefante, el oso, el patito, el conejo...

-                la reina tiene un cocinero, pero ellos prefieren la comida que a veces han visto preparar en el comedor escolar y la que hacen los padres en casa.

-                siempre cantan por los cumpleaños y no cumpleaños (“Feliz, feliz no cumpleaños, a ti, a mí..” )

-                han conocido a distintas reinas y reyes, nogmos, Tararín y Tararán... y más personajes animados

-                pero no nos pasa como Alicia, que se despierta y todo ha sido un sueño; en el aula nuestros sueños se hacen realidad. 

 En el montaje que preparó Acuario Teatro la música cobraba un papel primordial, ya que las diversas escenas se iban sucediendo rítmicamente, adentrándonos así en una historia llena de fantasía y belleza musical. Utilizando todo tipo de recursos: el lenguaje, los temas musicales, la iluminación, los efectos especiales... crearon un ambiente mágico todos los artistas, técnicos... bajo la adaptación y dirección de Diego Guzmán.  

Ø             Actores:  Raquel Amegashie, Bermu Díaz, Marta Guzmán, Miguel Ángel Martín

Ø             Técnico luz y sonido: Pablo Pecino

Ø             Composición y dirección musical: Patricia Quiroga

Ø             Arreglos: Paco Ramos, Paco Ureña

Ø             Coros y temas musicales: Raquel Amegashie, Miquel Ángel Martín, Patricia Quiroga, Bermu Díaz, Marta Guzmán, Diego Guzmán

Ø             Letras: Diego Guzmán

Ø             Estudio de grabación: "Southwaves"

Ø             Ingeniero de sonido: Ignacio Pecino

Ø             Escenografía: Pedro Vez, Diego Guzmán

Ø             Atrezzo, vestuario, diseño programa y cartel: Pedro Vez

Ø             Carpintería: Manu Molina

Ø             Costura y reciclaje: Patricia Franco

Ø             Coreografías: Acuario Teatro

Ø             Iluminación y efectos especiales: "La Bujía"

Ø             Etc...

Y quisiera terminar mi artículo felicitando a esta compañía malagueña “Acuario Teatro”, los espectáculos que realizan: trabajos musicales, adaptaciones de cuentos, pasacalles, campañas escolares, creaciones propias... Podéis conocerlos mejor en esta dirección: http://www.acuarioteatro.cjb.net/   Desde pequeña he estado disfrutando con ellos, en la Caseta Infantil de la Feria de Agosto de Málaga,  en festivales, en las cadenas locales, autonómicas y nacionales de televisión, y ahora de maestra, veo como el alumnado de infantil se divierte con la música que suena en sus espectáculos y que los sumerge en ese “País de las Maravillas” del que Charles Lutwidge Dodgson nos hizo partícipes en su día.