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LAS CONSAGRACIONES DE HALFFTERSevilla, Teatro de la Maestranza. Temporada de abono de la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla. 25 de mayo de 2007. Beethoven: La consagración del hogar. Concierto para piano nº 2. Stravinsky: La consagración de la primavera. Stefan Vladar, piano. Pedro Halffter, director. Por Fernando López Vargas-Machuca. Recién salido de la dirección de Fidelio, se reencontraba Pedro Halffter con Beethoven para ofrecernos una lectura sincera, hermosa e idiomática de la obertura de La consagración del hogar, página hasta ahora nunca interpretada por la ROSS que su actual director ha tenido la gran lucidez de incluir en su programación. Hubo la dosis justa de brillantez, elegancia y poesía en una interpretación bien planteada tanto en lo expresivo como en lo técnico, aunque hubiera sido deseable un más cuidadoso equilibrio de planos sonoros, pues las maderas no siempre fueron audibles. Igualmente notable fue su dirección del Segundo concierto para piano, pero aquí defraudó por completo Stefan Vladar. No se le puede reprochar al joven pianista austriaco que ofreciera un Beethoven marcadamente fortepianístico, pues al fin y al cabo tenía entre manos una obra estrenada en 1795, pero sí que su interpretación fuera extremadamente rígida, mecánica, precipitada, superficial, frívola e insensible. Una interpretación de todo punto impresentable de la que el lector se puede hacer una idea escuchando los incalificables clips beethovenianos que Vladar incluye en su página web. Cerró Halffter la velada con otra Consagración, la genialmente escrita por Stravinsky. Lo mejor de su lectura fue el formidable trabajo técnico realizado junto a la ROSS, magnífica en todas sus secciones bajo una batuta meticulosa, muy atenta a la claridad del entramado orquestal y por completo alejada del efectismo y del descontrol. Supo además subrayar los aspectos más sensuales y -sobre todo- misteriosos de la partitura frente a los más violentos y telúricos que habitualmente se ponen de relieve, lo que no deja de ser una opción muy válida en una partitura que, por mucho que su autor clamara contra compositores de tiempos pasados -impagables sus rebuznos sobre Parsifal que se incluyen en las notas al programa-, debe a la tradición más de lo que a éste le hubiera gustado. Ahora bien, hubo irregularidades en el desarrollo de la obra. La introducción fue magnífica, sugestiva y bastante gótica, pero la “danza de los adolescentes” comenzó sin la fuerza necesaria. Por fortuna Halffter logró ir acumulando tensiones hasta culminar en una “danza de la Tierra” no especialmente violenta ni aristada, pero en cualquier caso admirable. Volvieron después las tinieblas en la introducción a la segunda parte, onírica e inquietante como debe ser, pero a partir de aquí la batuta, demasiado atenta a controlar la orquesta y a construir correctamente el complejísimo edificio sonoro, no logró inyectar la dosis de tensión y electricidad -que no necesariamente de violencia o salvajismo- aquí imprescindible, culminando en una “danza de la elegida” algo deslavazada. Lástima. ENLACES RECOMENDADOS Web oficial de Stefan Vladar: http://www.stefanvladar.com/ Web de la ROSS: http://www.rossevilla.com Web del Maestranza: http://www.teatromaestranza.com
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