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Número 30º - Julio 2.002


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ENTREVISTA A PHILIPPE ENTREMONT


Philippe Entremont

Por Daniel Mateos MorenoLee su Curriculum.

 

¿Cuál es la orquesta que le ha causado mejor impresión en España?

Estoy muy impresionado de cómo se han desarrollado nuevas orquestas en España, fuera de Madrid y Barcelona. Orquesta como las de Tenerife, Malaga, Sevilla, etc.

¿Piensa que las orquestas españolas están al nivel de las europeas, incluso al nivel de Viena?

No, mire, Viena es excepcional. La filarmónica de Viena, la de Berlín, el Concertgebaw de Asterdam, etc. evidentemente son mejores. Sin embargo, las orquestas españolas son muy buenas.

¿Cuál es su opinión concretamente sobre la orquesta Filarmónica de Málaga?

Es una orquesta que me gusta mucho. Sus intérpretes tocan muy bien conmigo. Hemos trabajado juntos en Madrid, Biarritz, Bratislava, etc.

Profundizando aún más... ¿cuál es la orquesta que prefiere dirigir de todo el mundo?

Sería injusto por mi parte nombrar una en concreto. Hay una cosa que no me gusta, y son las comparaciones. No se trata de una carrera, sino de cómo los músicos hacen música. En los últimos 20 años la calidad de las orquestas ha subido en todo el mundo. Yo soy un director itenerante, y soy feliz porque ya no me encuentro nunca malas orquestas.

¿Cuál cree usted que es la razón del aumento de nivel de las orquestas?

Es siempre difícil mejorar. Sin embargo, basta mirar a los jóvenes que tocan los instrumentos hoy en día: su nivel es mucho mayor de lo que lo era en los jóvenes de otras generaciones.

¿Cómo definiría usted la música, qué es música para usted?

Música para mí lo es todo. No me gusta leer sobre música. Creo que soy bueno haciendo música, no hablando o leyendo sobre música.

¿Entonces no le gustan los musicólogos?

Bueno... ¿es usted un musicólogo? -carcajada-

No, -entre sonrisas-, soy compositor.

Eso de ser compositor es algo muy bueno -sonrisa-. Por supuesto está bien saber cosas sobre música. Sin embargo, yo soy lo que podríamos llamar instintivo: yo dejo libres mis instintos musicales, que me dirigen más que cualquier otra cosa.

¿Cómo empezó con la música?

Existía una tradición musical en mi familia. Mi padre era violinista y director, y mi madre pianista. Yo no tuve elección, tenía que ser músico. Sin embargo, yo tengo dos hijos (un hijo y una hija), y ninguno toca ningún instrumento. Ambos aman la música.

¿Qué prefería ser de joven, director o pianista?

Pianista. Definitivamente, pianista. Yo me hice director sin perseguirlo. Empecé a tocar los conciertos de Mozart de piano y a dirigirlos desde el piano, y así empecé.

¿Estudió dirección de orquesta alguna vez?

No. Eso dice mucho de mí. - Se ríe a carcajadas - . Por supuesto alguien hoy en día tiene que aprender cómo leer una partitura orquestal, hacer partituras orquestales. Sin embargo, lo básico sobre la dirección orquestal yo lo aprendí tocando bajo la batuta de los mejores directores de orquesta del mundo, en mi larga carrera como pianista, de 20 años. Recuerdo que toqué un concierto con Eugene Ormandy, que fue mi mejor concierto. Fantástico director de orquesta. Fue muy fácil para mí adaptarme.

¿Cuáles son los mejores directores de orquesta para usted en la historia?

Los más conocidos. Si observamos los vídeos que tenemos hoy en día de los antiguos, destacaría a Toscanini. La claridad y la precisión de Toscanini es maravillosa. Karajan también, Ormandy, Ricardo Mutti, Simon Rattle. La primera vez que Simon Rattle dirigió una orquesta, yo era el solista. Él era muy joven y yo aún más, en Londres.

¿Cuál es el compositor que se siente más agusto dirigiendo?

Mozart. Me gusta todos los compositores, pero el que pondría a parte es Mozart. El único compositor que no me gusta es Scriabin.

¿Por qué no?

Su música para mí es desordenada, enferma, neurótica.

¿Cuál es su opinión sobre las vanguardias actuales? ¿Triunfarán en un futuro?

Experimentamos siempre. Para encontrar algo se necesita experimentar. Sin embargo, estos experimentos no me atraen. Muchos compositores actuales están volviendo al pasado, a los años 80. Es muy difícil contestar a esta pregunta. Creo que los años dorados de la composición no son los actuales. En la actualidad no veo a ningún Bartók o Stravinsky. Si cogemos a Boulez, por ejemplo, que es un brillante compositor y hombre brillante, ¿qué decir entonces?

Hablando sobre esto, por qué piensa usted que el público prefiere la música más antigua.

Esto siempre ha ocurrido. La gente cuando escuchó la consagración de la Primavera pensó que era una obra terrible. Hoy en día esta obra es un clásico. Por esta razón yo soy un compositor muy precavido, porque no sabemos lo que va a triunfar en un futuro. Otros compositores tuvieron mucha importancia en su época, y ahora están completamente olvidados.

¿Qué le recomendaría a los jóvenes que terminan sus estudios en los conservatorios?

Tienes más oportunidad de ser presidente de tu país que ser un pianista internacionalmente conocido. Hay muchos pianistas. Sin embargo, si cogemos a los más importantes pianistas hoy en día, quizás sólo hay 20.

¿Cuál es la razón de esta dificultad?

Han de tener un extraordinario talento. No es una cuestión de número de horas empleadas tocando su instrumento. Has de tener algo más que no se puede explicar, algo dado por Dios. Talento, en resumen. Hay mucha gente que toca muy bien, pero no son Heifetz o Ojstrak.

¿Cuáles son sus planes para el futuro?

Viena. Mi próximo proyecto es actuar como director la orquesta de la televisión Shangai. Una nueva orquesta, sólo llevan un año. Y muchas otras cosas.