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COSAS DE DOSPor Don Profondo. No está el horno para bollos en el mundillo del disco, y menos aún en el -a todas luces minoritario, por mucho que nos empeñemos- campo de la música clásica. De ahí que despierten nuestra simpatía proyectos tan económicamente arriesgados como éste que nos presentan la pianista Ana Bevanides y el clarinetista Pedro Rubio, dos compactos de producción digamos "artesana", pero muy cuidada, destinados a difundir su talento en un campo más amplio del que permiten sus actividades puramente concertísticas. El sello es Zenobia Records, en principio especializado en Música Antigua, tratándose de los primeros cedés de su serie Zenobia Sounds, donde han de tener cabida aquellos productos de repertorio más tradicional, que no por ello convencional.
Ignoro qué difusión comercial van a alcanzar estos compactos, así como su precio final -es decir, su competitividad en el mercado-, pero lo cierto es que me lo he pasado estupendamente escuchándolos. En el primero nos encontramos a la pianista ofreciendo en solitario un recital con obras de Falla, Montsalvatge, Granados y el malagueño Eduardo Ocón (compositor sobre el que Filomúsica ofreció amplios artículos en los números de marzo y abril del pasado año). Hay que tener valor, desde luego, dados los grandes nombres asociados a este repertorio. Que nuestra artista no llegue a la genialidad de aquellos importa poco, porque Bevanides hace gala de una técnica irreprochable, una gran sensibilidad y un fino sentido de lo español que en ningún momento cae en el tópico. Su pianismo, elegante sin renunciar a la intensidad dramática, es de altura. Sólo un reproche: en el cedé no hay notas al programas. Eso sí, éstas se incluyen en la página web del sello; puede usted leerlas haciendo click aquí, y de paso bajarse gratis dos pistas del disco para degustar el arte de esta señora. El segundo compacto guarda aún mayor interés para el potencial comprador, dado el original acoplamiento y la relativamente escasa competencia discográfica de altura. En él a la pianista se une Pedro Rubio, conformando -por la fusión de sus apellidos- el Dúo Rubens, con ya once años de trayectoria a sus espaldas. También él dotado de un considerable talento, ofrecen un bellísimo recorrido por la escritura para clarinete y piano que nos lleva desde el Gran dúo concertante de Weber hasta la deliciosa Cats Suite de John Noble (escrita en 1976), pasando por Brahms, Debussy y Poulenc. Es quizá en la prodigiosa Sonata op. 120, nº 2 del autor de Réquiem Alemán donde menos aciertan, pues siendo el resultado notable, se echa de menos un sonido más puramente brahmsiano y un mayor poso espiritual. En el resto están estupendos, perfectamente compenetrados, líricos y evocadores cuando las circunstancias lo requieren, y particularmente atentos a los guiños humorísticos de las dos páginas más recientes.
De nuevo la web de Zenobia permite (aquí) leer las notas al programa -que en este caso sí están en la carpetilla- y descargarse varias pistas. Disco precioso, muy recomendable para los amantes del clarinete y de la música de cámara. Nuestra enhorabuena a los intérpretes: se merecen el éxito de esta su primera aventura discográfica, y la mejor de las suertes para su futuro artístico.
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