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EL VIOLÍN VAGABUNDO
Por
Rubén Flórez
Bande
El violín ha sido
uno de los instrumentos más mimados en toda la historia de la música,
también es uno de los instrumentos actuales de origen más remoto, y que no
ha sufrido grandes modificaciones de forma, como las que sí han sufrido
los instrumentos de viento-metal. Ha sido un instrumento tocado tanto por
príncipes en sus cortes como por vagabundos en las tabernas, un
instrumento que cuenta con una amplia literatura, desde lo más antiguo a
los estilos más actuales, quizás porque es un instrumento agradecido y
permite una gran variedad de registros tanto virtuosísticos, como
formales, y que tiene (si está bien tocado, claro) una gran expresividad y
personalidad.
En este nuevo disco de Harmonia Mundi pueden apreciarse (a pequeña escala,
por supuesto, es sólo un disco), todas esas virtudes y características del
violín, y el tratamiento que ha recibido en distintas partes del mundo,
principalmente Europa. Aquí se incluyen obras desde: Bartok, Sarasate,
Paganini, Tchaikovsky ... a los menos conocidos como: Vladigerov, Frolov,
Kroll, Rajna. A cargo de las interpretaciones están dos jóvenes artistas
que, oídos los resultados, parecen prometer, el violinista ucraniano Graf
Mourja y la pianista moscovita Natalia Gous.
Está claro que pretender hacer todo este recorrido no siempre va a tener
los resultados esperados, aunque la implicación sea mucha: intentar
conseguir el idioma, la expresión de una melodía mejicana, y a la vez
intentar extraer sonidos hebraicos en un mismo disco, corre el riesgo de
defraudar; no por la falta de implicación, repito, sino por la falta de
idioma. Pero no deja de tener su interés.
Las obras puramente virtuosísticas, o concebidas como tales, son la
Fantasía de concierto sobre Carmen, Op.25 de Pablo de Sarasate, y una
transcripción (de Fritz Kreisler) para piano y violín del último
movimiento del segundo concierto para violín y orquesta de Paganini,
"La Campanella". Obras correctamente tocadas, con todas las
dificultades ahí, que no tienen el cuerpo de los "grandes" pero que son
muy disfrutables.
Siguiendo con la literatura violinística "clásica" (europea) nos
encontramos con el Vals-scherzo Op.34 de Tchaikovsky, muy sutil,
y rubateado, con ese juego de staccato, muy bien conseguido. Las
Danzas populares rumanas Sz.56 de Bartok cuentan aquí con una
interpretación entregada, puramente idiomática, y con un dominio del
virtuosismo, de los juegos melódicos, etc, de verdadero maestro, sería
interesante saber cómo afrontaría Mourja la obra violínistica de
envergadura del maestro húngaro.
Después ya nos vamos a otras obras, clásicas, y no tan clásicas de otras
literaturas, por ejemplo de Frolov se nos ofrece Una pieza en el
estilo de blues que nos recuerda "muy mucho" a las obras de Gerswhin,
muy bien fraseada, pero sin conseguir ese "alma negra". De Manuel Ponce
tocan una transcripción de Heifetz, que él mismo popularizó, de
Estrellita, una melodía mexicana, a la que le falta aquí, esa
implicación "latina". De Thomas Rajna, compositor, y pianista sudafricano
para mí desconocido, nos interpretan una obra graciosísima titulada
Tarántula con continuos contrastes percutidos entre el piano y el
violín. Del mismo estilo es Banjo y violín una obra de William
Kroll, en el que el violín a la vez que saca su sonido, intenta conseguir
también el del banjo, en un scherzo muy simpático, completamente
coordinados los dos intérpretes.
Gaus es una pianista, discreta, pero que en estas obras de "juegos" se
implica concienzudamente.
Ya de menos interés, al menos para mí, son la obra del escocés Cyril Scout
Lotus Land, demasiado elegíaca y dilatada, y Horo de
Vladigerov, sobre temas búlgaros, pero es que tantas paráfrasis, y danzas,
acaban cansando y una obra de Shchedrin Imitation d´Albeniz donde
yo no escucho, o noto a Albéniz por ningún lado.
En resumen, un disco, con intérpretes entregados, jóvenes, y seguramente
futuras promesas (a ver en qué acaba su carrera), que nos hacen un
recorrido por obras conocidas, y no tan conocidas de la literatura
violínistica, en gran parte de sus variantes. Un disco que se escucha con
sumo gusto, que permite oír a algunos compositores poco interpretados.
REFERENCIAS:
"LE VIOLON VAGABOND". Diferentes obras y autores.
Violín: Graf Mourja. Piano: Natalia Gaus.
Harmonia Mundi HMC 901785.
Página web:
www.harmoniamundi.com
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