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Muraday entre flamencos Por Víctor Pliego de Andrés. Lee su curriculum.
Romeo & Julieta. Nuevo Ballet Español. Intérpretes: Mayte Bajo, Carlos Rodríguez y Ángel Rojas. Coreografía: Carlos Rodríguez. Con la colaboración especial como artista invitado de Chevi Muraday. Teatro de Madrid, 17 de noviembre a 8 de diciembre de 2004. Rojas y Rodríguez son unos jóvenes artistas que poco a poco conquistan la madurez tras a una fulgurante y temprana carrera como bailarines y coreógrafos, creadores de la magnífica compañía del Nuevo Ballet Español. Con Romeo & Julieta, Carlos Rodríguez aborda una creación de mayores ambiciones, con la que penetra en lo narrativo más que en otros trabajos anteriores, donde la brillantez de los sucesivos números sostenía el espectáculo. El reto ha dado como resultado otro bello ballet sobre un tema recurrente, que no aporta nada nuevo al asunto, pero que nos permite disfrutar una vez más del arte y de la fuerza de estos magníficos bailarines, secundados por un elenco de alto nivel. Como siempre, los solos de Rojas (Mercuccio) y Rodríguez (Romeo) destacan. También sobresale por su arte Mayte Bajo como Julieta, aunque también hay algunos momentos de conjunto vistosos. En esta ocasión lo más original y llamativo de todo fue la intervención, como artista invitado, de Chevi Muraday, otro de nuestros más luminosos bailarines-creadores. Muraday encarna a un inquietante Fray Lorenzo, cuya expresión contrasta fuertemente con el estilo flamenco de la compañía. Rojas y Rodríguez muestran sensibilidad, y generosidad con esta acertada invitación que enriquece enormemente la función. Romeo & Julieta fue estrenada en abril de 2003, dentro del Festival internacional de Madrid en Danza, pero para esta reposición han realizado una versión completamente renovada. La música, compuesta para la ocasión, es funcional y estereotipada. Está servida en directo por ocho buenos músicos. La puesta en escena recurre a alguna imagen tópica, pero resulta económica y atinada. Con su fuerza, su arte y su inspiración de siempre, Rojas y Rodríguez van caminando hacia una madurez que nos dará que hablar. (Fotografía Vallina)
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