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DEGUSTANDO A SCHUBERT
Por
Rubén Flórez
Bande
Nos llega por
parte de Virgin un nuevo registro del chispeante y vivaz Quinteto "La
Trucha" de Franz Schubert, interpretado esta vez por una selección de
músicos en cierto modo muy diferentes, y casi todos ellos franceses. Al
piano, el (en muchas ocasiones) discreto Frank Braley, al violín y cello
los competentes hermanos Capuçon (Renaud y Gautier, respectivamente), a la
viola Gérard Caussé (profesor de viola de la Escuela Superior de Música
Reina Sofía, y en su día primer viola y miembro fundador del Ensemble
Intercontemporain), y el primer contrabajo de la Orquesta Filarmónica de
Viena, Alois Posch.
Este conjunto de músicos, cada uno ya con un idioma propio, con una media
de edad muy juvenil, firman una interpretación muy interesante, al menos
para el que esto escribe.
Es una interpretación la suya muy al estilo "francés"; me explico, es una
visión muy "paladeada", en la que cada frase tiene un valor, pero que no
pretende ser original; un sonido en ocasiones lánguido, pero del que se
extrae una cantidad de color, y eso que no son un quinteto "homogéneo":
cada uno intenta resaltar lo más bello de su instrumento, no como un
sonido único, como pasaría a cuartetos "profesionales", aquí cada uno
pretende dejar su firma, pero con mucha elegancia.
El piano de Braley se mantiene en un segundo plano, no quitando nada de
protagonismo a los demás integrantes, como también hizo en su día una
Hepzibah Menuhin con el Cuarteto Amadeus (que sí sonaba compacto). No
tiene que ver nada su piano con el de Serkin, Curzon o Richter; aunque
también... ¡con quién le voy a comparar yo!
El violín de Renaud, consigue un sonido muy bello, en cierto modo recuerda
a los inicios de un Pierre Amoyal, o un Agustin Dumay, aunque después cada
uno se fue por su lado; quizás este joven violinista tendría que limar sus
sonoridades agudas, ya que a veces suenan algo metálicas, pero eso no le
quita vistosidad, ya que se luce en toda una serie de guiños y de recursos
que raras veces se escuchan en esta interpretación.
Caussé al igual que Braley se mantiene en un segundo plano, pero da un
gran soporte armónico a la obra, poco "espacio" por desgracia tiene para
lucirse. A Renaud al cello, le pasa algo así como a su hermano, un sonido
muy bello muy cuidado, quizás algo empalagoso, no con un lenguaje propio
(aunque, claro, hay que tener en cuenta la edad), pero que se luce aquí de
lo lindo, también explorando recursos y guiños nuevos. Y por último Posch
con su contrabajo consigue un sonido rotundo, no ostentoso, con cierto
humor dándole un toque "refunfuñón" a su parte.
Una interpretación interesante, juvenil (salvo el último movimiento que
sea quizás algo más pensado), más preocupado en conseguir una belleza
individual que en conjunto, que tiene su interés, porque así se descubren
pasajes que en interpretaciones "compactas" no se escucharían. Una
versión, en definitiva, despreocupada, que no quiere decir frívola. Aunque
claro, para preferencias los antes citados: Curzon con miembros del Octeto
de Viena, Richter con el Cuarteto Borodin, o Serkin con miembros del
Festival de Marlboro.
El resto de obras que se incluyen en el presente disco, corren a cargo de
Renaud Capuçon y Frank Braley. La primera de ellas las Variaciones
para violín y piano sobre "Tröckne Blumen" un lied correspondiente al
ciclo de Schubert La bella molinera, en el que Capuçon vuelve a
lucir aquí su bello timbre, incluso imitando las respiraciones del
supuesto cantante, donde matiza, alarga, retiene.. las notas para darle
así un efecto más dramático, ciertamente conseguido; la cosa cambia cuando
se mete con las variaciones a fondo, aquí ya mira más el lado técnico de
su instrumento, y extrae las partes más "virtuosísticas" del mismo. Braley
acompaña dignamente, aunque aquí tampoco tenga mucho para lucirse.
La última obra, también la adaptación de un lied, la Litanei auf das
Fest aller Seelen, tiene una interpretación más íntima y recogida que
la anterior; lo malo, pues su brevedad.
Disco interesante para ver por dónde se mueven las nuevas generaciones de
instrumentistas... franceses.
REFERENCIAS:
SCHUBERT: Quinteto para piano y cuerdas en La Mayor, D.667
"La Trucha" , Variaciones sobre "Trockne Blumen" para violín y
piano D.802 , Litanei auf das Fest aller Seelen para violín
y piano D.343
Piano: Frank Braley, Violín: Renaud Capuçon, Viola: Gérard Caussé,
Violoncello: Gautier Capuçon, Contrabajo: Alois Posch.
VIRGIN CLASSICS 55632
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