Revista mensual de publicación en Internet
Número 61º - Febrero 2.005


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DEGUSTANDO A SCHUBERT
 

Por Rubén Flórez Bande

          

Nos llega por parte de Virgin un nuevo registro del chispeante y vivaz Quinteto "La Trucha" de Franz Schubert, interpretado esta vez por una selección de músicos en cierto modo muy diferentes, y casi todos ellos franceses. Al piano, el (en muchas ocasiones) discreto Frank Braley, al violín y cello los competentes hermanos Capuçon (Renaud y Gautier, respectivamente), a la viola Gérard Caussé (profesor de viola de la Escuela Superior de Música Reina Sofía, y en su día primer viola y miembro fundador del Ensemble Intercontemporain), y el primer contrabajo de la Orquesta Filarmónica de Viena, Alois Posch.

Este conjunto de músicos, cada uno ya con un idioma propio, con una media de edad muy juvenil, firman una interpretación muy interesante, al menos para el que esto escribe.

Es una interpretación la suya muy al estilo "francés"; me explico, es una visión muy "paladeada", en la que cada frase tiene un valor, pero que no pretende ser original; un sonido en ocasiones lánguido, pero del que se extrae una cantidad de color, y eso que no son un quinteto "homogéneo": cada uno intenta resaltar lo más bello de su instrumento, no como un sonido único, como pasaría a cuartetos "profesionales", aquí cada uno pretende dejar su firma, pero con mucha elegancia.

El piano de Braley se mantiene en un segundo plano, no quitando nada de protagonismo a los demás integrantes, como también hizo en su día una Hepzibah Menuhin con el Cuarteto Amadeus (que sí sonaba compacto). No tiene que ver nada su piano con el de Serkin, Curzon o Richter; aunque también... ¡con quién le voy a comparar yo!

El violín de Renaud, consigue un sonido muy bello, en cierto modo recuerda a los inicios de un Pierre Amoyal, o un Agustin Dumay, aunque después cada uno se fue por su lado; quizás este joven violinista tendría que limar sus sonoridades agudas, ya que a veces suenan algo metálicas, pero eso no le quita vistosidad, ya que se luce en toda una serie de guiños y de recursos que raras veces se escuchan en esta interpretación.

Caussé al igual que Braley se mantiene en un segundo plano, pero da un gran soporte armónico a la obra, poco "espacio" por desgracia tiene para lucirse. A Renaud al cello, le pasa algo así como a su hermano, un sonido muy bello muy cuidado, quizás algo empalagoso, no con un lenguaje propio (aunque, claro, hay que tener en cuenta la edad), pero que se luce aquí de lo lindo, también explorando recursos y guiños nuevos. Y por último Posch con su contrabajo consigue un sonido rotundo, no ostentoso, con cierto humor dándole un toque "refunfuñón" a su parte.

Una interpretación interesante, juvenil (salvo el último movimiento que sea quizás algo más pensado), más preocupado en conseguir una belleza individual que en conjunto, que tiene su interés, porque así se descubren pasajes que en interpretaciones "compactas" no se escucharían. Una versión, en definitiva, despreocupada, que no quiere decir frívola. Aunque claro, para preferencias los antes citados: Curzon con miembros del Octeto de Viena, Richter con el Cuarteto Borodin, o Serkin con miembros del Festival de Marlboro.

El resto de obras que se incluyen en el presente disco, corren a cargo de Renaud Capuçon y Frank Braley. La primera de ellas las Variaciones para violín y piano sobre "Tröckne Blumen" un lied correspondiente al ciclo de Schubert La bella molinera, en el que Capuçon vuelve a lucir aquí su bello timbre, incluso imitando las respiraciones del supuesto cantante, donde matiza, alarga, retiene.. las notas para darle así un efecto más dramático, ciertamente conseguido; la cosa cambia cuando se mete con las variaciones a fondo, aquí ya mira más el lado técnico de su instrumento, y extrae las partes más "virtuosísticas" del mismo. Braley acompaña dignamente, aunque aquí tampoco tenga mucho para lucirse.

La última obra, también la adaptación de un lied, la Litanei auf das Fest aller Seelen, tiene una interpretación más íntima y recogida que la anterior; lo malo, pues su brevedad.

Disco interesante para ver por dónde se mueven las nuevas generaciones de instrumentistas... franceses.


REFERENCIAS:

SCHUBERT: Quinteto para piano y cuerdas en La Mayor, D.667 "La Trucha" , Variaciones sobre "Trockne Blumen" para violín y piano D.802 , Litanei auf das Fest aller Seelen para violín y piano D.343
Piano: Frank Braley, Violín: Renaud Capuçon, Viola: Gérard Caussé, Violoncello: Gautier Capuçon, Contrabajo: Alois Posch.
VIRGIN CLASSICS 55632