Revista mensual de publicación en Internet
Número 62º - Marzo 2.005


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TOSCA en La Faràndula de Sabadell

 Por Ovidi Cobacho Closa, Historiador del arte (Catalunya).

·        Autor: G. Puccini, con libreto de G. Giacosa y L. Illica.

·        Intérpretes: Carmen Ribera (Tosca), Albert Montserrat (Cavaradossi), Alberto Arrabal (Scarpia), Antonio Fajardo (Angelotti), Toni Marsol (Sacristán), Sergi Bellver (Spoletta). Cor d’Amics de l’Òpera de Sabadell, Cor Juvenil de l’Orfeó de Sabadell, Orquestra Simfònica del Vallès.

·        Dirección musical:  Elio Orciuolo.

·        Dirección escénica: Nunzio Todisco.

·        Producción: Amics de l’Òpera de Sabadell.

·        Lugar y Fecha: Teatre de La Farándula, Sabadell 25 – II- 2005. 

 

Después de inaugurar esta temporada con una notable producción de Roméo et Juliette de Gounod y una menos lucida Doña Francisquita de Amadeu Vives, la asociación Amics de l’Òpera de Sabadell ha alcanzado un nuevo éxito con esta Tosca de Puccini. Y es que,  a pesar de no disponer de los recursos habituales de un gran coliseo, la asociación que preside Mirna Lacambra ha realizado nuevamente un ejercicio ejemplar de concisión, en la elección de voces -prometedoras y de gran de calidad- y en la efectividad del montaje escénico.  

El elenco vocal estaba encabezado por el tenor Albert Montserrat que nos deleitó con un Cavaradossi de primer orden. Con agudos poderosos y bien timbrados, y un noble estilo de canto y entrega escénica,  Montserrat rindió el teatro a sus pies ya en el segundo acto después del arrollador Vittoria, vittoria!, coronando su actuación con una tormenta de aplausos y bravos después de su conmovedora aria del tercer acto E lucevan le stelle. No quedó atrás su pareja escénica, Carmen Ribera en el papel de Floria Tosca, con un canto vigoroso y de bella factura. Su interpretación de la apasionada y atormentada heroína de Puccini brilló tanto en lo vocal como en lo escénico, sacando el máximo rendimiento dramático de sus dúos con el pintor y Scarpia, y firmando un emotivo Vissi d’arte. El tercer personaje protagonista recayó sobre Alberto Arrabal, quién encarnó un Scarpia de acentos más elegantes que perversos, del todo convincente y de muy notable vocalidad. Muy correcto el resto del reparto con Toni Marsol como Sacristán, Sergi Bellver como Spoletta y Antonio Fajardo como Angelotti, así como las intervenciones de Josep Jarque (Sciarrone y Carcelero) y María Arredondo (pastorcillo).

No fallaron tampoco los coros, precisos y equilibrados, cosa que pone en relieve la buena labor que está realizando su director Daniel Martínez. La Simfònica del Vallès, bajo la batuta del maestro italiano Elio Orciuolo, a pesar de un primer acto algo rígido, fue ganando fluidez y riqueza expresiva en el transcurso de la obra, ante una partitura muy sutil y nada fácil. La dirección escénica del veterano tenor Nunzio Todisco resultó efectiva y estuvo siempre al servicio de la obra, dentro de una producción escénica modesta pero ingeniosa y de gran sentido descriptivo. En resumen, una muy digna producción de la que deberían tomar buena  nota más de uno de los grandes coliseos.