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GRANDES DIRECTORES DEL TERCER
REICH
Por
Angel Riego
Cue. Lee su
Curriculum.
Reaparece en
formato DVD un documento que ya era bien conocido por los aficionados por
su edición en video VHS, entonces como ahora a cargo del sello "Bel Canto
Society" de Nueva York, y que recopila todas las filmaciones que se
conservan del período nazi en las que los protagonistas son célebres
directores de orquesta haciendo música. La fuente son los noticieros de la
época, pues a menudo el ministerio de Goebbels filmaba a estos músicos con
fines propagandísticos.
Lo primero que llama la atención en estas imágenes es la constante
presencia musical de Los Maestros Cantores de Wagner, realmente
llega a dar la impresión de que no se tocara otra música en Alemania
durante aquella época. Tal vez se deba esta presencia a su carácter
nacionalista, con un monólogo final donde el personaje de Hans Sachs
exalta el arte alemán, o tal vez porque se dijo que era la ópera
predilecta de Hitler.
No todos los fragmentos, claro está, tienen la misma importancia, pues los
hay de elevado valor musical y otros cuyo interés, aunque no sea más que
por su breve duración, no pasan de lo anecdótico. A continuación
examinaremos el contenido del DVD empezando por las secciones que nos
parezcan de mayor interés.
Si hay una interpretación de una pieza completa en este DVD que merezca el
apelativo de "versión de referencia" es sin duda la Obertura de Los
Maestros Cantores dirigida por Wilhelm Furtwängler a la Filarmónica
de Berlín en febrero de 1942 ante los obreros de la fábrica AEG, también
editada en CD audio por Tahra. Es una filmación muy conocida, de hecho en
la serie de TV "El Mundo en Guerra" podemos ver los compases
iniciales, pero solamente aquí se puede disfrutar entera, incluyendo
largos planos en los que la cámara abandona a la orquesta y al director, y
prefiere enfocar a un público de trabajadores que parecen absortos en la
música (o quizás ponen cara de circunstancias). Un documento memorable en
todos los sentidos. Qué diferencia con otra realización de la misma
Obertura, a cargo de Leo Blech en 1933, mucho más humorística y menos
heroica; aún eran tiempos de paz. Curiosamente, Leo Blech era judío,
aunque se le incluye en esta selección porque su popularidad le permitió
seguir en Alemania hasta 1937, con lo que vivió los primeros 4 años del
nuevo Reich.
La otra selección de los Maestros que al menos podamos decir que
contiene una pieza completa es el monólogo final de Hans Sachs, cantado
por Wilhelm Rode y dirigido por Karl Böhm en presencia del ministro
Goebbels, quien dirige antes unas palabras al público. En realidad se
ofrecen unos minutos de la Obertura y se enlaza uno de sus temas con el
tema semejante que abre el monólogo final de Sachs. En cuanto al monólogo,
si bien Rode era indudablemente un gran artista, las imágenes muestran una
escena totalmente fosilizada, con los cantantes actuando con una
solemnidad que hoy parece un tanto ridícula.
El recuento de las piezas que aparecen completas finaliza precisamente con
la que se ofrece en primer lugar, la obertura de Guillermo Tell
de Rossini dirigida por por el casi desconocido Max von Schillings, quien
sólo vivió 6 meses del Tercer Reich, pues murió en el verano de 1933,
aunque en tan corto período le dio tiempo a expulsar a todos los artistas
judíos de la Academia Prusiana de las Artes, desde su puesto de presidente
de la misma.
Del máximo interés, pese a tratarse de meros fragmentos, son dos
filmaciones de los 4 minutos finales de la Novena Sinfonía de
Beethoven, a cargo de los dos directores más ilustres que trabajaban
entonces en el Reich: Wilhelm Furtwängler y Hans Knappertsbusch. La
Novena era también obra predilecta de Hitler, y se interpretaba en un
concierto especial la víspera de su cumpleaños. La filmación de
Furtwängler procede de un concierto de este tipo, el 19 de abril de 1942:
la historia es bien conocida, el director intentó escabullirse del
compromiso pero Goebbels fue a buscarlo a Viena y consiguió que dirigiera
el concierto; cuando termina, se ve a Goebbels saliendo a saludar a
Furtwängler, quien después de darle la mano derecha al ministro, se pasa
un pañuelo de la mano izquierda a la derecha y lo usa para restregarse el
sudor en esta última, un gesto que los que defienden a Furtwängler de la
acusacion con colaboracionismo con los nazis interpretan como de desprecio
hacia Goebbels (se limpia la mano que le dio al dirigente nazi), pero por
lo que se ve en la pantalla, nada autoriza a tal interpretación. Hay que
notar que en esta ocasión se filmó solamente la imagen, el sonido está
añadido a partir de otra Novena de Furtwängler (la bien conocida
de marzo de 1942) con lo que a veces se aprecia cierta desincronización
entre lo que se ve y lo que se escucha.
A partir de 1943 ya fue imposible conseguir que Furtwängler dirigiera el
concierto del cumpleaños de Hitler y le sustituyó Hans Knappertsbusch,
aunque la filmación del final de la Novena que aquí se incluye
parece que proviene no del concierto sino de un ensayo, pues se ve la sala
vacía. Frente a la crispación que le daba Furtwängler, este final de la
Novena es mucho más solemne, e impresiona ver el rostro de "Kna" captado
tan en primer plano.
Con esto se acaban los fragmentos con algún interés musical, pues el resto
no pasa de lo anecdótico: Karajan dirigiendo en el París ocupado (Maestros
Cantores, por supuesto), aunque sólo se le ve unos segundos,
suficientes para percibir que en aquella época usaba melena similar a la
de Luis Cobos; el resto del noticiero (2 minutos en total) contiene
imágenes de la entrada de los alemanes en París y de la llegada en tren a
la ciudad de Winifred Wagner, responsable entonces de los Festivales de
Bayreuth. También de los Maestros aparecen los segundos finales,
después de terminar Sachs su monólogo, del Festival de guerra (1943-44),
que dirigieron Furtwängler y Abendroth, aunque no se sepa de cuál de los
dos proviene esa filmación; el noticiero une estas imágenes a otras
previas de Hitler llegando a Bayreuth, siendo aclamado por sus "fans",
jóvenes en su mayoría, como si fuera una estrella actual del rock. Sin
embargo, las tomas pertenecen a años distintos, pues la última vez que
Hitler asistió al festival de Bayreuth fue en 1940. El recuento finaliza
con Clemens Krauss dirigiendo en París la "Incompleta" de
Schubert (apenas si se le ve un minuto) y con unas palabras de Goebbels
sobre el arte alemán leídas por un locutor sobre imágenes de
representaciones de ópera y con música de fondo. En total, el DVD dura
unos 53 minutos, lo que acaba sabiendo a poco.
Aparte de su corta duración, hay que señalar a esta edición algunos otros
reparos que debe conocer todo potencial comprador de este DVD. En primer
lugar, la calidad de imagen, siendo muy aceptable, sería aún mejorable si
hubiera una edición oficial a cargo de un sello importante; de hecho,
algunos momentos de estos noticieros han aparecido en otros lugares con
mejor calidad de imagen, como la escena en la que Furtwängler da la mano a
Goebbels que sale al final de la película Taking Sides (aún no
estrenada en España, y que trata precisamente sobre el proceso de
desnazificación al que se vio sometido Furtwängler después de la guerra).
Pero nadie más que "Belcanto Society" editó estos materiales completos en
la era del VHS, y presumiblemente nadie más lo hará en la era del DVD
(nadie de fuera de Japón, se entiende, pues el país asiático es el número
uno en ediciones de este tipo de material). En segundo lugar, la fuente de
este DVD parece estar en algún formato de video profesional (Betacam o
Umatic), lo que se nota en alguna típica "arruga" que recorre
ocasionalmente la pantalla y, lo que es peor, en el "tirón" con que
empieza cada sección, típico de una cinta de video detenida y puesta a
caminar. Por último, los subtítulos (en inglés) que presentan a cada
artista y la obra que interpreta, o que traducen discursos, están impresos
en la pantalla sobre un recuadro negro, un truco típico que denota que se
han tenido que tapar otros subtítulos, presumiblemente en japonés.
A pesar de los reparos expuestos, que estamos seguros sabrán disculpar los
amantes de estas grabaciones históricas, estamos ante unos documentos cuya
importancia no será necesario recalcar pues, aunque muchos grandes
directores se exiliaron de Alemania a la llegada de los nazis al poder
(entre ellos Bruno Walter, Otto Klemperer, Erich Kleiber, Fritz Busch,
etc.), el nivel musical siguió siendo grande solamente con los que se
quedaron. Hay que mencionar, además, como otro aliciente de esta
publicación el libreto que se incluye, con un artículo y comentarios
biográficos a cargo de un reconocido especialista como es Frederick
Spotts.
REFERENCIAS:
"GRANDES DIRECTORES DEL TERCER REICH":
DVD BELCANTO SOCIETY BCS-D0052
Distribuidor en España: LRMUSIC
Página web:
www.lrmusic.net
e-mail:
lrmusic@lrmusic.net
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