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EL CANTO DEL VIOLÍN
Por
Rubén Flórez
Bande
EMI nos remite un
cuádruple álbum, de cierto interés, en el que se hace un recorrido por el
repertorio violinístico (no son todos los que están, ni están todos los
que son, léase épocas y estilos) a cargo de los solistas de más nombre "de
la casa", desde los históricos (Menuhin, Milstein, Rabin, Oistrakh...) a
las nuevas generaciones (Vengerov, Capuçon, Chang...) pasando por el
controvertido Kennedy o el mismo Lorin Maazel, más conocido como director.
Las obras son las más populares y accesibles. Un producto, destinado para
el público en general, para todas las edades. En él hay obras enteras, y
fragmentos de otras muchas, siendo esto último un handicap, al menos para
quien esto escribe.
Empezaremos por orden (según cantidad) de los intérpretes. Seguramente el
más representado sea Menuhin: de él podemos escuchar, un "Allegro
apassionato" del Concierto Op.64 de Mendelssohn junto con Kurtz,
en el que el violinista ya estaba algo limitado técnicamente, pero donde
recrea una versión con garbo. Con Kurtz también interpreta el "Pas de
deux" de El lago de los cisnes de Tchaikovsky, este sí, más
delicado, más melódico, donde las limitaciones no se perciben, y sí la
capacidad melódica. De Youmans interpreta el famoso Tea for two
junto con Grappelli y sus amigos, en un repertorio que no es el suyo, pero
que atrae por su curiosidad. Lo peor de Menuhin como muestra quizá sea "La
Campanella" del Segundo Concierto para violín de Paganini, junto
con Alberto Erede, donde técnicamente es lamentable escucharle, y se nota
que la obra se le hace grande.
Itzhak Perlman se marca una Fantasía de Carmen de Sarasate, con
un inspirado Foster, tan virtuosística como sin idioma; una muy
recomendable, Havanaise de Saint-Saëns, con el gran Martinon a la
batuta; una Schön Rosmarin de Kreisler que ha tenido mejores
versiones que esta, donde Perlman quizá peque de demasiado "sutil"; y un
interesante y para mí desconocido Perpetuum mobile de Novacek.
De las nuevas generaciones el que más veces aparece representado es Renaud
Capuçon, que interpreta junto al también joven pianista Braley, el "Blues"
de la Sonata para violín y piano de Ravel, una versión muy
nostálgica. Junto con Daniel Harding, interpreta una Introduction &
Rondo capriccioso de Saint-Saëns muy chispeante, se pasa en un
suspiro. Al lado de su hermano, el violonchelista Gautier Capuçon
interpreta el arreglo de un Passacaille muy poco "ortodoxo" pero
que sorprende por la compenetración de los dos músicos. Por último, otra
vez junto con Braley, interpreta la Letanei de Schubert, ya
comentada en esta revista, muy íntima y recogida, con el lirismo justo.
También de las nuevas generaciones, en este caso, algo mayor, aparece
también Christian Tetzlaff, uno de los más interesantes violinistas del
momento, aunque algo relegado por su compañía. Por él se nos ofrece el
último movimiento del Concierto de Sibelius, junto con Dausgaard.
Una lectura hiriente, objetiva, no cae en el romanticismo, interesante al
menos, lástima de la batuta que no está a la altura, demasiado rutinaria.
También Tetzlaff nos ofrece una selección de las Partitas nº 2 y
nº 3 para violín solo de Bach, a las que intenta aplicar en un
instrumento moderno algunos de los conceptos historicistas, también una
lectura interesante.
Frank-Peter Zimmermann quizá ya no entre en el catálogo de los jóvenes,
pero las grabaciones que aquí se incluyen son de la época en la que aún
era un "chaval" como por ejemplo, dos Caprichos de Paganini, el
primero, y el último (nº 1 y nº 24). Su sonido es muy
pequeño y su virtuosismo, limitado, pero aún así, con ese toque de
"inocencia" tienen su encanto, no es el arrebato que muchos le dan. Se
incluye también una muy buena interpretación del "Presto" de la Sonata
para violín y piano K.526 de Mozart, esta sí muy idiomática, y donde
el "violín pequeño" de Zimmermann está en su salsa.
Del gran David Oistrakh se nos ofrecen dos interesantes documentos, uno de
ellos es el movimiento final de el Concierto de Brahms, junto con
Szell, aquí Oistrakh ya estaba algo mayor, y técnicamente se nota, pero
aun así consigue una interpretación que ya quisieran hoy en día muchos
jóvenes. Szell se pasa en ocasiones de algo "machacón". La otra obra de
Oistrakh que aparece en estos volúmenes es el "Rondo" del Tercer
Concierto para violín de Mozart, junto con la Filarmónica de Berlín y
haciendo él también las labores de director; es su Mozart algo rudo y
contundente, pero que no deja mal sabor, una forma de tocar que ya no
queda.
Nathan Milstein, interpreta un interesante último movimiento del
Concierto de Beethoven, junto con Steinberg, y muy vitalista, y
ensoñadora es su Poupée valsante de Poldini.
Nigel Kennedy, el "alumnísimo" apreciado de Menuhim, también aparece aquí
suficientemente (para mí, erróneamente) documentado. Interesante, por
dulce sobre todo, la "Canzonetta" del Concierto de Tchaikovsky,
junto con Kamu, el resto es totalmente "prescindible": una "hortera"
interpretación de "El Verano" de sus "archivendidas" Cuatro Estaciones
de Vivaldi, y un Vuelo del moscardón de Rimsky, ¡¡pesante!!
También hay un apartado "historicista" breve, pero lo hay, con un muy buen
Concierto para violín BWV 1056 de Bach, con la Europa Galante, y
al violín y dirección un fogoso Fabio Biondi.
El resto del volumen lo forman un "Intermezzo" de la Sinfonía Española
de Lalo, por una algo insípida Mutter, los Aires bohemios de
Sarasate, por el malogrado Rabin, más concentrados que virtuosísticos, el
también malogrado Ferras nos acerca un Tzigane de Ravel más
romantizante que otra cosa, pero al menos tiene algo que decir, la gran (y
olvidada) Patrice Fontanarosa, interpreta un arreglo (de Joachim) de la
Danza Húngara nº 1 de Brahms de gran envergadura, Zukerman nos
deleita junto con Barenboim con un muy buen "Adagio sostenuto" de la
"Kreutzer" de Beethoven...
En resumen, volumen interesante para quien le guste "el canto" del violín,
para regalar, ahora que ha empezado el curso, aquellos que han elegido
violín en el Conservatorio, también para los que se acerquen a la música
clásica... pero, claro está, no apto para aquellos que quieran encontrar
algo nuevo.
REFERENCIAS:
"LE CHANT DU VIOLON":
EMI 586885 ( 4 CD´s )
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