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EL "DOBLE CONCIERTO" DE LLOYD WEBBERPor Fernando López Vargas-Machuca.
Este compacto se anuncia, ahí es nada, como el actual número uno en las ventas de EMI Classics. The Woman in White Suite es ni más ni menos que lo que su nombre reza: una suite sinfónica de veintiséis minutos de duración con los principales temas de la última creación escénica (se estrenó en septiembre de 2004) de Lord Andrew Lloyd Webber, bien arreglada para la ocasión por un tal Laurence Roman. El plato fuerte del disco es más difícil de definir. Digamos que bajo el nombre de Phantasia se esconde una fantasía concertante para violín y violonchelo sobre el material temático de la más exitosa producción del compositor británico, El fantasma de la ópera, dispuesto además siguiendo el mismo orden con que aparece en el musical. Quiere decir esto que por mucho que Geoffrey Alexander -otro notable arreglista- se empeñe en incluir pasajes virtuosísticos para darle una apariencia más "clásica" a la pieza, con el Doble concierto brahmsiano como más obvia referencia, la intención por dirigirse y complacer al público amante de la obra original queda en primer plano. ¿Resultados? Los intentos del compositor de Evita por ser reconocido como compositor clásico se han visto hasta ahora frustrados, y si no ahí está para demostrarlo el hoy olvidado Réquiem que estrenaran y grabaran Lorin Maazel y Plácido Domingo. Desde luego Phantasia no se sostiene si la ponemos al lado de las grandes obras de la literatura concertante, pero si la tomamos como lo que realmente es, una suite sinfónica de un musical en la que colaboran dos solistas instrumentales, funciona de maravilla. La partitura original, además, era de cierta calidad dentro de su género: es verdad que resulta más blanda y dulzona que la auténtica obra maestra de Lloyd Webber, que sigue siendo Jesus Christ Superstar, pero desde luego es muy superior a otras célebres composiciones del autor, empezando por la soporífera Cats. Señalemos además como curiosidad que se han incluido aquí algunas melodías que fueron compuestas ex-profeso para la versión cinematográfica dirigida hace un par de años con sorprendente acierto por el otras veces detestable Joel Schumacher. Punto y aparte merece la interpretación de este disco. En teoría la estrella del mismo es el chelista Julian Lloyd Weber, por obvias razones de parentesco, pero su labor no termina de convencer: el sonido que extrae de su Stradivarius es bonito pero algo dulzón y un tanto frágil, cantando las melodías con una expresividad algo blandengue y lánguida que lo que consigue es acentuar los defectos de la escritura de su hermano. Todo lo contrario a lo que hace Sara Chang: su violín suena con una belleza y robustez incomparables, desgranando su parte -que suele coincidir con la de la protagonista del drama, Christine- con una pasión, un vuelo lírico y un convencimiento arrebatadores. Confieso que se me han humedecido los ojos cada vez que que la violinista norteamericana interpreta "All I ask of you", todo un modelo de cómo una música algo pastelosa puede emocionar profundamente si está en manos de una artista de verdad que se cree al cien por cien todo lo que hace. Por su parte la orquesta londinense realiza una digna labor y la batuta de Simon Lee -experto en la obra de Lloyd Weber y director musical de la película- sabe ser vistosa sin caer en el estruendo ni en lo hortera. La Suite de La mujer de blanco se escucha con agrado, como si fuera la correcta banda sonora de una cinta hollywoodiense sobre la novela gótica de Willkie Collins, pero en ningún momento llega a emocionar, resultando más aparente que sincera; se echa de menos una atmósfera más turbulenta y un mayor vuelo lírico en sus melodías. En todo caso como relleno se agradece. Las cosas están muy claras, pues: si a usted no le agrada el género del musical (conozco a grandes melómanos que lo detestan profundamente) puede pasar de este compacto. Si por el contrario le gustó El fantasma de la ópera, y además le convence que no haya sonidos pop y que el tono general sea más "clásico" que el propio de un musical, probablemente este disco le arrebatará, y además le dirá -merced a la estupenda Sara Chang- cosas nuevas sobre la partitura. Presentación con omisiones (¡falta el minutaje de las obras!), sonido irreprochable y precio caro. Que cada cual lo vea. REFERENCIAS ANDREW LLOYD WEBBER/GEOFFREY
ALEXANDER: Phantasia. Enlace recomendado: http://www.julianlloydwebber.com/
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