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Número 76º - Mayo 2.006


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BOCCHERINI ON PERIOD INSTRUMENTS

 

 Jerez, Teatro Villamarta. 28 de abril de 2006. F. Sor: Introducción y variaciones sobre "Malboroug se fue a la guerra" Op. 28; Introducción y variaciones sobre "La flauta mágica" Op. 9. L. Boccherini: Quinteto en Mi menor, G 451; Quinteto en Re mayor, G 448. Cuarteto Neobarok. José Miguel Moreno, guitarra. Carina La Debla, castañuelas.

 Por Fernando López Vargas-Machuca.

Do you like Boccherini on period instruments?" Eso me preguntó la soprano Nancy Argenta durante una firma de autógrafos allá por 1993 en Sevilla tras un monográfico dedicado al compositor de Lucca a cargo de la Age of Enlightenment Orchestra. Yo, que por entonces estaba comenzando a adentrarme en esto de la música antigua, respondí que sí, que me gustaba mucho. Hoy añadiría dos cosas: que me gusta no sólo este autor sino todo el Clasicismo y primer Romanticismo interpretado con instrumentos originales... pero también que esto es así siempre y cuando los intérpretes lo hagan de manera convincente, pues por desgracia son muchos los músicos de medio pelo que, amparados en las cuestiones filológicas, intentan darnos gato por liebre con interpretaciones que dejan mucho que desear tanto en lo técnico como en lo expresivo, haciendo pasar por "limpieza" la mera frivolidad y por "hallazgos" una sucesión de efectismos.

No es el caso del guitarrista José Miguel Moreno ni del cuarteto alemán Neobarok, quienes nos ofrecieron el pasado 28 de abril en el Teatro Villamarta un espléndido concierto con obras del citado autor. Völker Möller, Maren Ries, Christoph Mayer y Ariane Spiegel han colaborado durante algunos años con Reinhard Goebel y su Musica Antiqua Köln, intérpretes que a pesar de su radicalidad y atrevimiento siguen siendo de los más sólidos y acertadamente renovadores de todo el panorama historicista. Las huellas de dicha estancia se notaron en sus interpretaciones de Boccherini, aún más ácidas, teatrales y contrastadas que las que ofreciera el propio Moreno junto a La Real Cámara en su soberbia grabación de hace ahora seis años, que ya de por sí se alejaban del tópico del Clasicismo exclusivamente amable, equilibrado y sin aristas. También es cierto que las interpretaciones de Neobarok no alcanzaron ni el soberbio nivel técnico ni ese peculiar aroma "de sonrisa de maja de Goya" del conjunto liderado por Emilio Moreno, pero en todo caso los alemanes ofrecieron música por los cuatro costados.

¿Y qué decir de José Miguel Moreno? Pues que independientemente de que la ejecución no fuera en algún momento aislado del todo limpia, nadie le puede discutir su posición como uno de los más grandes músicos que ha dado España en las últimas décadas. Y de ello dejó constancia no tanto en su magnífico Boccherini como en sus geniales interpretaciones de las dos fantasías de Fernando Sor, un prodigio de cantabilidad, concentración y olfato para extraer las esencias más profundas, personales y conmovedoras de cualquier música que se le ponga por delante; auténtico humanismo a la guitarra sonado de la manera más bella.

La guinda de la velada la puso la guapa y esbelta bailaora alemana (!) Carina La Debla, que enriqueció con un sobrio y elegante baile y su destreza a las castañuelas el famoso Fandango del Quinteto en Re mayor, no sólo en el punto sugerido en la partitura sino a lo largo de toda la página, una licencia que los hermanos Moreno ya se habían permitido en  su referido registro discográfico. Las palmas por sevillanas del respetable estuvieron más justificadas que nunca, y no sólo por las circunstancias referidas sino también por la proximidad de la Feria jerezana. No ha sido mala idea anticiparla una semana antes con un poco de Boccherini "on period instruments".

Web del Villamarta: www.villamarta.com