LA VIGENCIA DEL CAFÉ-CONCIERTO

Por Ismael González Cabral. Periodista y Crítico Musical.

Seguramente pocos serán los lectores españoles que conozcan al compositor e intérprete argentino Uña Ramos (1933). En cambio, y pese a que tiene su residencia fijada en Francia, en su país natal y en general, en Hispanoamérica, el protagonista del presente álbum es reconocido como una celebridad en el mundo de la música. Aunque muchos lo desconozcan, su nombre está indisociablemente ligado con la famosa melodía de El condor pasa, que registró en los años 70 junto con Paul Simon.

Ramos es un virtuoso de la flauta de pan que ha dejado testimonio de su particular hacer en un amplio número de grabaciones discográficas en sellos especializados en música étnica. Sin embargo hay, en su formación musical, un claro compromiso con la creación propia, si bien es la compilación y difusión de melodías andinas el centro de su trabajo interpretativo, que le ha llevado a ofrecer numerosos conciertos en los lugares más insospechados del mundo.

El registro que comentamos, que se presentó en Berlín, aparece editado por Arton Records, compañía alemana que desde hace algún tiempo tiene a Uña Ramos como uno de sus principales centros de atención. En él, el pianista argentino Sebastián Forster oficia correctamente como solista al servicio de unas partituras no especialmente exigentes, y de moderado virtuosismo.

Escuchando las piezas del autor, que por la sencillez expositiva calificaremos de melodías, rápidamente llevarán al oyente a situarse en el corazón de un antiguo café-concierto. Y es que, toda aquella atmósfera de melancolía y placidez es disfrutable en el trabajo pianístico de Uña Ramos.

Estamos por tanto ante un disco muy agradable como música de acompañamiento o de fondo,  ya que la atención se diluye con prontitud en las cinco o seis primeras composiciones. Ahora bien, lejos de categorizar esta música como menor, que no lo es en absoluto, nos encontramos ante una obra muy rica en inventiva melódica, y de claras reminiscencias hispanoamericanas. Títulos como Amanecer, Golondrinas, Puerto de Buenos Aires o Tormenta India son especialmente clarificadores respecto de las intenciones descriptivas de esta música.

El carácter ligero de la obra de Ramos no ha de disgustar a nadie avisado. Hay aquí espacio para la alegría y la tristeza. Placidez y ritmo también comparten escenario en unas partituras que no dudan en coquetear con el tango, el jazz, o el romanticismo más tradicional. A la vez, hay en estos 50 minutos de música gran parte del sencillo y directo encanto de Uña Ramos.

REFERENCIA:

Uña Ramos: Piano works

Sebastián Forster, piano.

ARTON RECORDS

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